Miedo a los gatos: ailurofobia o gatofobia

¿Le temes a los gatos? No te preocupes, no eres el único. Existe una fobia llamada ailurofobia o gatofobia, que afecta a muchas personas en todo el mundo. Aunque los gatos son tiernos, juguetones y adorables para algunos, para otros pueden ser la fuente de un miedo irracional e incontrolable. En este artículo, exploraremos qué es exactamente la ailurofobia, sus posibles causas y cómo superar este miedo paralizante. Si alguna vez te has preguntado por qué alguien puede tener miedo a estos pequeños felinos, estás a punto de descubrirlo. ¡Prepárate para enfrentar tus miedos y descubrir el fascinante mundo de las fobias a los gatos!

Miedo a los gatos: ailurofobia o gatofobia

Si tienes un miedo extremo o irracional a los gatos, no estás solo. Sólo en Estados Unidos, casi el 22,2% de la gente tiene miedo a diversos tipos de animales, y el miedo a los gatos recibe muchos nombres diferentes. Una variante común es la ailurofobia, que tiene su origen en el griego (ailuros (gatos) y phobos (miedo o miedo)). Otro nombre para esta fobia es gatofobia (etimológicamente gato español para gatos). También se le llama galeofobia (nuevamente en griego, gato-galemacr).

Las fobias a los animales son comunes y muchas personas tienden a temer a más de un animal. Para las personas con ailurofobia, el miedo a los gatos puede tener un impacto importante en su vida y actividades diarias.

Causas de la gatofobia o miedo a la fobia a los gatos

Hay varias explicaciones posibles para el miedo a los gatos:

  • Un desencadenante común de la ailurofobia es observar las reacciones de miedo de otras personas hacia los gatos. Un niño puede desarrollar este miedo al ver a sus padres o cuidadores (o incluso personajes de dibujos animados en un programa de televisión) comportarse con miedo frente a los gatos.
  • Se sabe que las mujeres adquieren gatofobia cuando ven programas de televisión o películas en las que personajes típicamente femeninos muestran o expresan miedo saltando sobre sillas o huyendo para evitar a los gatos. Esta idea se ve reforzada por el hecho de que se muestra una figura masculina protegiéndola del animal.
  • Los gatos son depredadores por naturaleza. A menudo se los asociaba con la brujería, el folclore y el mal. Incluso los gatos domesticados pueden gruñir, silbar o arañar. Observar este comportamiento felino cuando era niño (o incluso cuando era adulto) conduce directa o indirectamente a esta fobia.
  • Matar o dañar a los gatos se considera un delito penal en muchas culturas, particularmente en el antiguo Egipto, donde los gatos eran venerados, momificados o preservados. Estos sentimientos religiosos también pueden provocar miedo a los gatos, especialmente en personas que ya están en crisis o que están naturalmente nerviosas o demasiado ansiosas.

Síntomas de ailurofobia o miedo a los gatos

Las personas con ailurofobia presentan ataques de pánico cuando se enfrentan a un gato. Otro síntoma de esta fobia es evitar a los gatos. En general, los individuos pueden exhibir el siguiente comportamiento:

  • “Respuesta de lucha o huida” al ver un gato, normalmente huyendo o tratando de defenderse.
  • Pueden estar presentes al menos cuatro de los siguientes síntomas: (i) palpitaciones, (ii) temblores o sacudidas, (iii) dolor en el pecho, (iv) náuseas, (v) mareos o aturdimiento, (vi) entumecimiento u hormigueo, (vii ) pensamientos de muerte, (viii) Sensación de asfixia.
  • En cuanto a la evitación en la Gatofobia; Las personas intentarán hacer todo lo posible para evitar a un gato, incluso si hacerlo los pone en riesgo. Cruzar la calle rápidamente o evitar a los gatos son sólo algunos ejemplos. Podrías evitar los programas de naturaleza o los canales de televisión en los que puedas ver un gato. También rechazan invitaciones a casas de amigos donde hay un gato como mascota.
  • Otras respuestas de evitación para la ailurofobia pueden ser sutiles: llevar bocadillos de comida para gatos para tirárselos o cerrar los ojos durante una escena de película, llevar spray de pimienta o hacer que un miembro de la familia revise el vecindario para asegurarse de que no haya gatos en el área. cerca.

Superar tu miedo a los gatos

La buena noticia para la mayoría de las fobias a los animales, incluido el miedo a los gatos, es que son fácilmente tratables. La mayoría de los casos leves de ailurofobia se pueden superar con unas pocas sesiones de terapia.

  • Para superar la gatofobia, es importante presentarse gradualmente a los gatos durante un período de tiempo más largo. Esto se puede hacer en varios pasos: (i) ver al gato desde la distancia, (ii) mirar sus dibujos, (iii) decir su nombre, etc. Estas formas limitadas de exposición contribuyen en gran medida a reducir el miedo a los gatos.
  • Para que la desensibilización gradual sea efectiva es importante que el fótico se mantenga en la situación y la practique muchas veces. Esto puede ayudar a reducir el uso de estrategias para evitar a los gatos, como llevar señales de seguridad y otros comportamientos sobreprotectores.
  • Al someterse a una terapia de exposición, es importante contar con la ayuda de amigos o familiares. Un terapeuta capacitado también puede ayudar a lograr resultados positivos.
  • También hay que aprender a volver a pensar diferente sobre los gatos. Hay muchas maneras de hacer esto: hay que identificar pensamientos, creencias y predicciones aterradoras y reemplazarlas por otras más realistas. Estas estrategias se pueden utilizar junto con la terapia de exposición para superar el miedo a los gatos.

Si sufres de gatofobia o ailurofobia; Usted no está solo. Sin embargo, debes tomar medidas para reconocer y comprender la naturaleza de tu miedo a los gatos para que puedas prepararte para enfrentar y superar tu fobia de una vez por todas.

¿Ahora que?
Lea los comentarios a continuación de otras personas que padecen esta fobia o comparta sus propias experiencias. Consulte también la sección Historias de lectores.

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